Había una ves dos niños que
vivían con su padre y su madrastra cerca de un bosque encantado. Ellos eran
Estrella y Pepe, todas las mañanas cuando su padre se iba a trabajar, su
madrastra les mandaban a cortar madera para que hiciera el desayuno.
Ellos iban lo más rápido que
podían para que su madrastra no les
regañase.
Una mañana cuando iban de
camino para su casa se encontraron con
un amuleto muy brillante que se encontraba tirado entre las hojas.
Al verlo lo agarraron y
aparecieron muchos animales fantásticos que hablaban. Entre ellos un dragón
mágico, ellos se asustaron y salieron corriendo llevándose el amuleto y olvidando
la madera para el desayuno.
Al encontrarse muy cansados
se detuvieron, y se dieron cuenta que estaban en un lugar que ellos no
conocían.
Ya era muy tarde y no habían
desayunado, se encontraban perdidos en medio del bosque y de pronto vieron una
luz brillante que salía del amuleto. Eran los animales fantásticos que salían
para ayudarlos. Confiaron en ellos y se subieron en el dragón para volver a la
casa.
Al llegar a casa encontraron
al padre muy preocupado. Estaba sólo, había dejado a la madrastra por no haber
cuidado a los sus hijos.
Estrella y Pepe le contaron
todo lo que había pasado esa tarde. Al debelar el secreto el, hizo que el
amuleto y los animales fantásticos desaparecieran para siempre.
Mishelle
2ºESO
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